Cómo animar a su hijo durante los exámenes finales

Publicado: 2024-09-16

Los estudiantes universitarios de primer año enfrentan una serie de desafíos únicos durante los exámenes finales, particularmente cuando están fuera de casa por primera vez. La transición a la vida universitaria trae consigo un nuevo nivel de rigor académico e independencia que puede resultar abrumador. Luego, la presión para tener un buen desempeño académico aumenta durante los exámenes finales porque los exámenes a menudo tienen un gran impacto en la calificación final. Aprobar una final podría marcar la diferencia entre aprobar una clase y, en algunos casos, un GPA más bajo podría significar menos ayuda financiera.

Estar lejos de casa también significa que carecen del sistema de apoyo inmediato y familiar del que antes dependían en la escuela secundaria. ¡Pero eso no significa que los padres no puedan brindar apoyo desde lejos! Si se mantiene conectado e involucrado, puede ayudar a sus estudiantes de primer año de la universidad a desarrollar resiliencia y las habilidades necesarias para tener éxito. Puede asegurarse de que se sientan apoyados y comprendidos. Aquí hay algunas maneras de ofrecer el aliento que necesitan durante este momento crucial:

1. Manténgase conectado

Lo más importante que puede hacer para apoyar a su estudiante universitario es hacerle saber que está ahí para ayudarlo. Priorice los controles periódicos, ya sea a través de llamadas, mensajes de texto o chats de vídeo. Durante estas conversaciones, fomente la comunicación abierta sobre sus experiencias y emociones, y valide sus sentimientos. La universidad puede ser estresante. Pero al mismo tiempo, existen formas saludables de afrontar la situación.

Escuchando activamente y mostrando empatía, puedes ayudarlos a sentirse comprendidos y menos aislados. Los chats programados periódicamente también pueden servir como una rutina reconfortante en medio del caos de la preparación del examen, recordándoles que tienen un sistema de apoyo confiable sin importar qué tan lejos estén.

Enviar paquetes de ayuda es otra forma eficaz de mantenerse conectado, mostrar su apoyo y recordarles que se preocupa. Puede llenar estos paquetes con sus refrigerios favoritos y elementos de estudio útiles, como resaltadores, fichas y notas adhesivas. Incluir toques personales, como cartas escritas a mano o pequeños recuerdos del hogar, puede hacer que estos paquetes sean aún más especiales. Si su hijo tiene dificultades para afrontar el estrés de los exámenes, intente incorporar pequeños obsequios para que se recupere, como tés calmantes o aceites esenciales calmantes.

Si no tiene tiempo para preparar un paquete usted mismo, puede solicitar paquetes en línea. Estos gestos, aunque parezcan pequeños, pueden tener un impacto significativo en su moral. Un pequeño obsequio o una llamada telefónica en el momento oportuno pueden ayudarles a sentirse cuidados y apoyados.

2. Promover hábitos saludables

Cuando su hijo esté lidiando con mucho estrés, trate de promover suavemente hábitos saludables para ayudarlo a manejar el estrés de los exámenes finales. Recuérdeles la importancia de una nutrición, hidratación y sueño adecuados, incluso durante estos intensos períodos de estudio. Anímelos a comer comidas equilibradas y a mantenerse hidratados, ya que una buena nutrición puede afectar significativamente sus niveles de energía y su función cognitiva. Si envía un paquete de ayuda, los refrigerios saludables como granola o mezclas de frutos secos son excelentes elementos de relleno.

Hacer hincapié en la necesidad de dormir con regularidad puede ser un tema delicado, especialmente si sus compañeros de cuarto pasan la noche en vela. Pero resalte cómo el descanso es crucial para la retención de la memoria y el bienestar general. A veces los hechos pueden convencerlos. También puede sugerirles que tomen descansos breves para realizar actividad física, ya sea una caminata rápida, una sesión de ejercicio o algunos estiramientos ligeros. El ejercicio regular puede ayudar a reducir el estrés y mejorar la concentración, haciendo que sus sesiones de estudio sean más efectivas.

Mantener un equilibrio entre el estudio y el tiempo personal es igualmente importante. Anime a su hijo a reservar tiempo para socializar con amigos, lo que puede prevenir el agotamiento y mantener su salud mental. Otra adición divertida a un paquete de ayuda podrían ser juegos para disfrutar con compañeros de suite. Cards Against Humanity, Telestrations, Codenames o Settlers of Catan son excelentes opciones, pero también pueden jugar muchos juegos con una baraja de cartas normal.

Las actividades que ayudan a reducir el estrés pueden ayudarlos a controlar la ansiedad y mantener una mentalidad tranquila y concentrada. Al promover estos hábitos saludables, puede ayudar a su estudiante de primer año a afrontar mejor la temporada de exámenes.

3. Ofrezca consejos y recursos de estudio

Si bien es importante mantener a su hijo tranquilo y combatir el estrés, todavía hay un examen importante en el horizonte y deberían estar estudiando, al menos un poco. Para mostrar su apoyo, podría ofrecer consejos y recursos de estudio. Sugiera usar tarjetas didácticas para repasos rápidos, resumir notas después de cada clase y enseñar el material a otra persona como una forma de reforzar la comprensión. También podría fomentar el uso de dispositivos mnemotécnicos para recordar conceptos complejos. Las técnicas de gestión del tiempo, como la Técnica Pomodoro, en la que estudian durante 25 minutos y luego se toman un descanso de 5 minutos, también pueden ayudar a mejorar la concentración y la productividad.

Además de las estrategias de estudio personal, recomienda aprovechar los recursos del campus. Anime a su hijo a unirse a grupos de estudio. Los centros de tutoría a menudo ofrecen ayuda personalizada y pueden abordar áreas específicas en las que podrían tener dificultades. Los laboratorios de redacción pueden leer los ensayos finales o los laboratorios de comunicación pueden proporcionar comentarios sobre una presentación grande. Recuérdeles que buscar ayuda no es una debilidad ni una señal de fracaso. Estos recursos están ahí para ayudarlos a tener éxito.

Si su hijo realmente tiene dificultades para mantenerse organizado y se niega a utilizar los recursos del campus, podría ayudarlo a crear un horario de estudio. Trabaje con ellos para desarrollar un plan equilibrado que asigne tiempos específicos para cada tema, asegurándose de que cubran todo el material necesario sin sentirse abrumado. Incluya descansos designados para evitar el agotamiento y fomente sesiones de revisión periódicas en lugar de estudiar a fondo en el último momento. Un horario de estudio bien estructurado puede proporcionar una sensación de control y reducir la ansiedad. Al ofrecer estos consejos y recursos, puede capacitar a su estudiante de primer año de la universidad para que estudie de manera más efectiva y afronte sus exámenes finales con confianza.

No se trata solo de sacar sobresalientes

Es importante asegurarle a su estudiante de primer año de la universidad que su esfuerzo y perseverancia son mucho más valiosos que lograr la perfección. Recuérdeles que el proceso de aprendizaje y su dedicación a sus estudios es lo que realmente importa. Enfatice que las calificaciones no son la única medida de su valor o potencial, y que está bien no obtener sobresalientes. Hágales saber que cuenta con apoyo y confianza inquebrantables en sus capacidades, independientemente de los resultados. Su confianza en ellos y en su arduo trabajo puede brindarles el estímulo que necesitan para mantenerse motivados y resilientes durante toda su vida universitaria y más allá.