Cómo gestionar una reorganización empresarial

Publicado: 2023-05-11

Las reorganizaciones empresariales son inevitables. Son necesarios para que las empresas se adapten a las condiciones cambiantes del mercado, mejoren la eficiencia general y logren sus objetivos comerciales más rápido. Sin embargo, el proceso de reestructuración no siempre es una experiencia fácil para todos.

Aunque el resultado final se prevé beneficioso, los cambios y el proceso de transición pueden ser arduos. Cuando se planifica y se ejecuta de manera deficiente, puede hacer que la fuerza laboral se sienta ansiosa e insegura sobre la estabilidad de la empresa. Todo esto mientras la gerencia trabaja bajo presión para cumplir con nuevas expectativas y metas. No obstante, esta no tiene por qué ser la situación. Si bien las reorganizaciones rara vez despiertan entusiasmo, la planificación y preparación minuciosas y el trabajo con los mejores consultores de diseño organizacional pueden ayudar a acelerar y suavizar el proceso para todos los involucrados.

Estos son los consejos más útiles para navegar las reorganizaciones de manera efectiva y lograr los resultados deseados.

  • Anticipar retroceso

Las reorganizaciones suelen dar lugar a la pérdida de puestos de trabajo, sobre todo después de un cambio significativo en la estructura organizativa. Es comprensible que esto genere trabajadores descontentos y, a veces, descontentos, que probablemente darán a conocer su descontento. Si hay chismes y malestar entre aquellos que están perdiendo sus trabajos y otros que pueden estar ansiosos por quedarse sin trabajo pronto, es apropiado comunicarse con ellos. Hágales saber qué condujo a los cambios, por qué es necesario, qué pueden hacer y qué puede hacer la empresa por ellos.

Los trabajadores tienen el potencial de dañar significativamente la imagen de una marca. Para frustrar esta amenaza, las organizaciones deben planificar en previsión de posibles retrocesos para mitigar los riesgos y salvaguardar los intereses de la empresa. Si su empresa maneja información confidencial, la seguridad de su red debe estar equipada contra posibles infracciones dentro de la organización.

Considere trabajar con los mejores servicios de TI administrados en St. Louis , Missouri, si se encuentra en el área, para ayudarlo a desarrollar estrategias de seguridad específicas para las necesidades de su organización.

  • Mostrar transparencia

Un proceso claro y transparente es una de las claves para una reorganización empresarial exitosa. Los detalles del proceso de reestructuración, en particular las razones, los objetivos y el cronograma, deben discutirse entre las partes interesadas y los empleados. La transparencia ayudará a aclarar cualquier confusión e incertidumbre que pueda haber y ayudará a todos a prepararse mejor para los cambios.

  • Facilitar la comunicación abierta
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Equipo de consultores de inversión empresarial que analizan el informe financiero anual de la empresa trabajando con documentos circulares y gráficos de donuts, utilizando portátiles, conceptos empresariales y financieros.

Cuando se trata de administrar empleados , la calidad de la comunicación puede hacer o deshacer su confianza en la empresa. Por eso es fundamental involucrar a los empleados en el proceso de toma de decisiones y brindarles la información y el apoyo necesarios para navegar los cambios. También sería prudente permitirles hacer preguntas y proporcionar comentarios que puedan ayudar a mejorar el proceso de transición.

Alentar a los trabajadores a ofrecer retroalimentación y expresar sus sentimientos con respecto a la reorganización de la empresa es un enfoque práctico para involucrarlos. Hacer preguntas abiertas puede generar conversaciones con perspectivas perspicaces sobre las emociones y experiencias de los empleados a medida que se adaptan a los cambios.

Es vital establecer un entorno seguro para que los trabajadores compartan sus puntos de vista. La comunicación abierta y las estrategias más inclusivas pueden brindar una perspectiva más amplia sobre los problemas y desafíos que la organización puede enfrentar durante el proceso.

  • Brindar apoyo y capacitación

Las reorganizaciones tienen un impacto significativo en los empleados que permanecen en la organización y en los que se despiden. Para aquellos que se quedan, adaptarse a nuevos roles y responsabilidades puede ser un desafío, especialmente si se espera que trabajen en diferentes departamentos o con nuevos miembros del equipo. La capacitación y el apoyo pueden ayudar a los empleados en transición a comprender sus nuevos roles y responsabilidades, especialmente si la mejora de las habilidades está en la agenda. Por otro lado, brindar apoyo emocional a los empleados afectados por despidos u otros cambios desfavorables es crucial.

Perder un trabajo puede ser traumático, mientras que la transición a un nuevo rol puede ser estresante. Los empleados de ambos extremos pueden necesitar apoyo para procesar sus emociones y adaptarse a los cambios sin problemas. Los recursos, como los programas de asesoramiento o de asistencia a los miembros del equipo, pueden ayudar a los empleados a sobrellevar el estrés y la incertidumbre de la reorganización.

  • Evaluar y ajustar

Evaluar la efectividad de una reorganización es fundamental para determinar si los cambios han llevado a los resultados deseados. Medir los resultados frente a los objetivos establecidos antes de la reorganización puede proporcionar información valiosa sobre el éxito del proceso. Este análisis puede ayudar a determinar las áreas que han mejorado o requieren mayor desarrollo. Llevar a cabo esta evaluación es esencial para realizar ajustes oportunos y evitar otras interrupciones en la fuerza laboral o el negocio.

También es esencial identificar cualquier consecuencia no deseada de la reorganización que no se haya considerado durante la fase de planificación. Por ejemplo, un empleado que fue trasladado a un equipo diferente puede haber tenido problemas para adaptarse, lo que provocó una disminución en el rendimiento. De manera similar, algunos departamentos pueden experimentar una disminución en la productividad debido a la reorganización. Abordar estas consecuencias no deseadas requiere identificar las causas fundamentales e implementar soluciones que también mitiguen el impacto. Esto podría implicar capacitación o apoyo adicional para los empleados afectados o reevaluar el plan de reorganización para abordar estos nuevos problemas.

Conclusión

Gestionar una reorganización empresarial es un proceso complejo y desafiante, pero también es una oportunidad de crecimiento y mejora. La comunicación efectiva, la planificación cuidadosa y el apoyo a los empleados durante el período de ajuste son cruciales para garantizar una transición sin problemas y minimizar las interrupciones en el negocio.

Por último, es esencial recordar que las reorganizaciones pueden tener consecuencias no deseadas, por lo que es imprescindible evaluar los efectos de los cambios y la eficacia del proceso e implementar los ajustes necesarios. Al seguir estas mejores prácticas y permanecer flexibles frente al cambio, las empresas pueden navegar con éxito las reorganizaciones y emerger más fuertes y resilientes.